lunes, 4 de mayo de 2020

EL DESAFÍO DE SER DOCENTE, BY MGTR. MANUEL MONTES


Los seres humanos nos educamos en dos procesos fundamentales y complementarios uno de orden social y otro de orden individual. Según diferentes culturas la educación se apoyaba en un concepto cósmico que situaba al hombre como parte de ese universo resultando fundamental conocer el contexto donde se desarrolla su existencia.

El ser humano como ser social se educa y se transforma en el contexto, fundamentalmente en su entorno familiar, laboral y amistades.

La sociedad constituye un espacio educador, el más abarcativo y efectivo de todos. Debido a eso la educación debe guiar a la persona a reclamar su contexto, no meramente sometiéndolo. La cultura y educación forma la capacidad de trasformación crítica de los individuos en una sociedad de permanente cambios.

Educación es un proceso de construcción inacabado, también se concibe como un proceso facilitador de los aprendizajes.

Los retos de la sociedad demandan del docente la demostración de una competencia personal real, basada en un dominio científico y la capacidad de llevarla a cabo.

Generalmente la docencia es considerada un proceso de formación inicial. Diversos autores destacan que la profesión docente debería ser abordada desde distintos estadios. Danielson (1996), destaca tres estadios, según si el docente es bien titulado.(i) noveles, un poco más experimentados en el crecimiento de su carrera(ii), competentes hasta lograr una excelencia profesional(iii), expertos.

La idea de una carrera en estos estadios cumple al carácter dinámico de la construcción los saberes y practica pedagógicas.

La forma de construir y fortalecer la profesión de ser docente se da a partir del dominio del campo del conocimiento y se va aprendiendo y desaprendiendo en la práctica de la docencia. El profesor deberá saber los límites de su ignorancia a través de la reflexión sobre sus prácticas, no lo sabe todo. De acuerdo a esto la actividad docente requiere ciertos requisitos básicos para apuntar a la construcción de la profesión: a) la sistematización de acciones, b) la producción de documentos, C) la investigación y d) el registro de prácticas.

Una de las mejores estrategias para garantizar el mejoramiento sustancial de las instituciones educativas en general es la habilidad de fomentar en los docentes la capacidad de actuar en comunidades profesionales de aprendizaje.

Para transformar las instituciones educativas en comunidades de aprendizaje con docente competentes que sepan demostrar su formación en acción, la literatura actualizada señala algunos aspectos a tener en cuenta: Énfasis en el aprendizaje atractivo y activo para el estudiante con contenido significativo; interés en el desempeño del estudiante, valorando lo que hace; promover una cultura colaborativa en la práctica pedagógica, educación permanente, construir las condiciones que permitan que cada estudiante sea exitoso; el docente debe actuar como un líder transformador, que crean en la habilidad de implantar una diferencia en las vidas de sus estudiantes.

Concluimos que los docentes representan ese motor de las instituciones, para que se realicen los cambios esenciales y por consiguiente con esto se dé la mejora educativa.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Sus comentarios son importantes siempre, saludos Prof. Manuel

Docencia

Docencia